Análisis de Película "Intensamente 2" La adolescencia como territorio emocional en expansión
- Mtra. Mónica Lisette Rayas Ortiz
- 14 abr
- 3 Min. de lectura
En la primera entrega de Intensamente, conocimos el mundo emocional de Riley desde su infancia: un territorio habitado por emociones básicas que ayudaban a navegar lo cotidiano. Pero en Intensamente 2, Pixar nos lleva de la mano a ese momento crítico, desconcertante y lleno de contradicciones que es la adolescencia. Y lo hace con una metáfora luminosa y, al mismo tiempo, brutal: nuevas emociones llegan para quedarse, aunque no sepamos muy bien cómo integrarlas.
Identidad en construcción
La adolescencia es un proceso de duelo. Un duelo por lo que ya no se es, por lo que se pierde en el paso de la niñez: la certeza, la espontaneidad emocional, la claridad. En su lugar, llega algo más complejo: la búsqueda de un nuevo yo, más profundo, más fragmentado, más incierto. Y en Intensamente 2, lo vemos representado cuando Riley comienza a preguntarse: “¿Quién soy ahora?”. Porque ser una “buena persona” o una “buena amiga” ya no basta: se inaugura la posibilidad de múltiples versiones de sí misma, algunas incómodas, otras todavía en construcción.
La llegada de las emociones sofisticadas
A medida que se instala el cambio biológico —el cuerpo crece, se transforma, se sexualiza, también llegan emociones nuevas, más sofisticadas:
Ansiedad, esa energía desbordada que intenta proteger de peligros que no se ven, creando planes elaborados, fantasías y hasta ataques de pánico si no se logra contener.
Envidia, que se filtra como comparación silenciosa: “Ojalá fuera como ella…”. Ayuda a quererse mover a lo nuevo, desde lo que la persona ve en su falta.
Vergüenza, esa emoción que nos invita a ocultarnos cuando creemos no ser suficientes.
Aburrimiento (Onuit), que aparece cuando nada parece tener sentido o estímulo. Ayuda para incentivar la creatividad del adolescente.
Nostalgia, que conecta con lo perdido, con lo que ya no volverá a ser como era. Pero la adolescencia la pérdida no debiera instalarse porque debe pesar más el descubrimiento por lo nuevo, que la nostalgia por lo perdido de la niñez.
Cada una de estas emociones viene a mover el sentido de sí. Vienen a derrumbar certezas, a desequilibrar lo conocido. Pero también, y esto es fundamental, vienen a formar.
Cuando la ansiedad ocupa el centro
Ansiedad, representada con color naranja y voz temblorosa, toma el control del tablero. Intenta contener las demás emociones, convertirlas en secretos, desterrarlas. Cree que si logra mantener todo bajo control, Riley podrá ser “ella misma”. Pero el punto clave de esta entrega es que ese nuevo yo aún no está listo… y eso también está bien. En el punto de mayor tensión, la ansiedad se quiebra en un ataque de pánico. La presión por sostener una identidad sólida se convierte en su mayor enemigo. Y en ese colapso aparece la clave: para poder seguir adelante, no se trata de tener un “yo” perfecto, sino de integrar cada emoción incluso las que queremos desechar.
El duelo adolescente y la integración emocional
Intensamente 2 nos muestra que los errores derrumban a Alegría porque lastiman el narcisismo, esa ilusión de que todo debe salir bien. Pero la lección es poderosa: Alegría puede volver a levantarse, aprender y seguir. Porque crecer también es eso: caerse, sentir todas las emociones, y poder volver a empezar.
En la mente de Riley, hay un espacio llamado Imaginalandia, donde se proyectan imágenes, se juegan deseos, y ocurren transformaciones mientras ella duerme. Ese espacio es clave: representa el inconsciente, ese lugar donde se integran experiencias, se procesan emociones, y el yo puede descansar para volver a organizarse.
Amar lo revoltoso
La adolescencia no es solo caos. Es también un momento fértil para imaginar nuevas formas de ser. Es un duelo, sí, pero también una oportunidad para integrar lo contradictorio, para dejar de extirpar partes de una misma y comenzar a abrazarlas. Amar lo revoltoso —como dice la película— es aceptar que somos muchas cosas a la vez, y que en esa pluralidad también hay belleza.
En Terapia en Voz Alta, creemos que el cine puede ser una forma poderosa de pensar(nos). Si esta película resonó contigo, si estás atravesando una adolescencia (propia o ajena), o si simplemente quieres compartir tu lectura emocional de Intensamente 2, te leemos en los comentarios.
Escrito por Mónica Rayas, abril 2024
Comments