top of page

5 señales para saber si te duele el alma

Actualizado: 29 ene

Uno va a terapia por necesidad, no es un lujo, tampoco una moda. Tampoco quiere decir que estés loco, sino que hay mucho dolor. Hay formas de calmar el dolor como vicios y actividades, pero hay formas más sanas de trabajar con el dolor, que no se sienten tan bien como las adicciones, pero curan de raíz, como la terapia a la que se le conoce como "análisis" o psicoanálisis. Puedes estar en dolor y no saberlo, por eso te comparto esto.

5 señales para saber si te duele el alma:


  1. Si la vida ya no tiene sentido.

  2. Si llevas extrañando en extremo a algún ser querido por más de 18 meses después de su fallecimiento o separación.

  3. Si ya no te motiva hacer el ejercicio que antes te gustaba y no lo has cambiado por otra cosa sana.

  4. Si comienzas a tener más ganas de estar aislado durante mucho tiempo, y notas que poco a poco has perdido interés en convivir con personas.

  5. Si has dejado de hacer cosas que requieren esfuerzo, y únicamente puedes hacer el mínimo esfuerzo como ver la televisión o redes sociales.


Si sientes alguna de estas señales eres candidato para ir análisis, si tienes dos o más síntomas seguro que no la estás pasando nada bien. Si te identificaste con todas, es muy probable que no puedas salir solo de esta situación y urgentemente necesites comenzar análisis, pues de lo contrario el dolor incrementará, te costará más trabajo salir de esta situación, y sentirás más desesperanza hasta ya no querer existir.




El alma eres tú mismo mientras haces tu vida, pero sientes que algo no está del todo bien contigo. No tiene que ser tu culpa, pero sí puedes responsabilizarte. Durante generaciones la humanidad ha venido heredando y arrastrando dolores del alma, que pueden manifestarse en cualquier momento de la vida de una persona, sin importar condición o edad. Afortunadamente puedes destrabar esas conflictivas heredadas analizándolas y transformándolas para que mientras vivas no sientas tanto dolor y en cambio puedas disfrutar más tu vida.


Para llegar a la raíz del dolor se requiere tiempo y esfuerzo, y no cualquiera está dispuesto a pagar el precio. Uno va a análisis a pesar del qué dirán, o a pesar que quien te toque de analista ni siquiera te agrade del todo al inicio. Uno va a análisis porque quiere sanar el alma.


Uno continúa en análisis porque aunque duela hasta el alma, sabes que ya no duele igual que antes. Sabes que si sigue doliendo entonces sigues teniendo razones para seguir analizandote. Uno continúa en análisis a pesar de que lo que te diga tu analista no te agrade e incluso te enoje, pero sigues por la sola esperanza de que te seguirás sintiendo un poco mejor cada vez.


Si te duele el alma, ve al especialista, se le llama psicoanalista. Es momento de tomar acción y agendar tu primer cita.


Escrito por, Mtra. Mónica L. Rayas Ortiz. 29 de enero 2024.



53 visualizaciones0 comentarios
bottom of page